La muerte de Celia Hart

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Extrañas circunstancias rodean la muerte de Celia Hart Santamaría
Cortesía Nueva Acción.

Desde el primer instante en que se conoció la noticia de la muerte, en un accidente de transito, de Celia Hart Santamaría, la hija de Armando Hart y Haideé "Yeyé" Santamaría y sobrina del "martir del Moncada" Abel Santamaría Cuadrado, se comienzo a especular sobre las extrañas circunstancias en que había ocurrido, las actividades políticas que había estado desarrollando la trostkista Celia, y la premura de su entierro.
El accidente ocurrió en horas de la noche del 7 de septiembre y ya al mediodía del próximo día (8) el cadáver de Celia, como el de su hermano, habían sido inhumados. -Por qué tanta premura?
Los expertos que han visto las fotos que ilustran esta nota, estiman que para producir esa clase de impacto y haber saltado el conten etica de la acera y chocado con tal fuerza, el pequeño automóvil debía de haber venido a una velocidad nunca menos a las 100 millas por hora, cosa casi imposible, que se pudiera hacer en una calle de Miramar, máxime con el mal tiempo existente y lloviendo y HABER ESTADO CONDUCIENDO POR LA IZQUIERDA.
Un detalle a considerar es el hecho de que Celia Hart, que no ocultaba su tendencia trsotkista, comenzó a ser una actividad pública y a tiempo completo de esas tendencia marxista y a llevar su militante activismo a muchos jóvenes hijos de personajes de la nomenklatura, en la misma época en que Fidel enfermo y delego en su hermano Raúl, un stalinista de hueso colorado, la dirección del gobierno.
No se necesita ser un experto en política para saber el hondo malestar que eso provoco en el animo del "heredero", máxime cuando Celia no se media para afirmar que su tío Abel, según ella había podido conocer por relatos de su madre (ambos ya fallecidos:Abel , muerto en el Moncada, "Yeyé" suicidada, en una fecha tan simbólica como un 26 de Julio) era un profundo admirador de Leo Dadidovich Bronstein, conocido como Leon Trostky.
Quien conozca a Raúl sabe que es fácil deducir que él pensaba que a Celia había que callarla de algún modo. Y Raúl no se anda por las ramas y un stalinista como él no iba a permitir que a una tendencia revisionista, defensora de la memoria de Leon Trostky y por ende acusadora de Stalin y sus crímenes, le crecieran las alas.
Lo demás pueden ser especulaciones, pero cuando la negra noche del mal desaparezca y se abran los archivos de la tiranía y se sepan los intrigulis secretos de esa satrapía, se descubrirán tantos aberrantes casos de asesinatos disfrazados de accidentes y suicidios, que los cubanos y la opinión publica mundial quedarán anonadados.
-Publicado por Lighthouse press 9-22-2008